El siguiente paso para innovar dentro de Google es Drive, un disco duro virtual que unifica todos los archivos y los pone en Internet. La diferencia con respecto a los servicios con que contaba anteriormente no es solo la integración de los mismos en un solo lugar, sino también cómo lo hace en los diferentes aparatos.
La nube de Google, como se denomina a los servicios de almacenamiento virtual, funcionará tanto con ordenadores Windows como Apple gracias a una aplicación, así como con móviles y tablets Android. El vicepresidente de Google, Scott Johnston, y responsable de esta división, asegura que pronto saldrá la versión para iPhone e iPad. La intención es que, de manera natural, se puedan tener accesibles los mismos documentos en los diferentes aparatos que se usan a los largo del día.
De inicio cada usuario contará con 5GB de almacenamiento gratis. A diferencia de lo que sucede con Gmail cuyo pago es anual, en Drive se paga por meses: 1,88 euros (2,49 dólares) por 25 gigas. 3,76 euros por 100 gigas y 37,71 euros por un terabyte, una cantidad que parece inalcanzable.
Google no se ha olvidado de sus comienzos como buscador. De ahí que añada una extraordinaria búsqueda en Drive, no solo busca por palabras dentro de los documentos de texto, sino también en las imágenes. Drive reconoce los monumentos más populares, colores, objetos como botellas, árboles, mesas...
Uno de los usos más interesantes será el reconocimiento óptico de caracteres (OCR), o lo que comúnmente se conoce como escanear un documento. Drive permite subir la imagen de una página de un libro, revista o diario y convertirlo en un documento de texto.
De momento, Google no tiene intención de hacerlo publico en Windows Phone, pero sí han creado un kit de desarrollo de aplicaciones para que, si una empresa lo desea, lo adapte. En la tienda de aplicaciones del navegador Chrome ya hay alguna muestra de lo que han hecho los primeros colaboradores del buscador. Se puede, por ejemplo, enviar un fax o editar un vídeo online.